En lo que se refiere a la decoración navideña me da mucha rabia tener cosas que compré o hice en un momento dado, las he utilizado 3 semanas o quizás 1 mes al año, y llega un día en el que ya sea por falta de sitio o porque no pega con la decoración de ese año, no las vuelves a poner y se quedan en una caja muertas de risa en el trastero. ¿A quién no le ha pasado esto?
Así que para intentar contrarrestar un poco lo que compro en estas fechas, siempre intento reutilizar esas cosas olvidadas y darles una segunda o tercera vida como ya habéis ido viendo en el blog a lo largo de los años.
En esta ocasión, voy a hacer una corona para poner en la puerta reciclando decoraciones navideñas de otros años y algún material que tenía por casa.
¿Qué necesito?
- Aro de porexpan. Yo he reciclado el que utilicé para hacer la corona de Rudolph y Santa Claus en el 2018
- Silicona caliente con su pistola
- Alfileres
- Arandela para colgarlo
- Contrapeso (opcional)
Y a partir de aquí, todo lo que quieras reutilizar
- Lana
- Ramilletes que hice para un jarrón, y acabé reutilizando en un centro de mesa, y ahora aquí.
- Bolitas de porexpan forradas con cola de ratón que hice para el árbol.
- Una estrella que utilizaba de tope del árbol
- Unas flores artificiales que me sobraron de este centro de mesa.
- Lazo de la corona de bolas y una percha
- Retales de cinta o cuerda
- Piñas pintadas que le he robado al centro de mesa de velas y piñas
¿Cómo lo hago?
Como yo he reutilizado un aro que había partido por la mitad para hacer las coronas del reno y Papá Noel, lo he vuelto a unir con una cinta de carrocero, y por tanto el porexpan en sí está feo, así que lo tengo que forrar con algo.
Podría ser con un trozo de tela, trapillo, cuerda, ramitas de pino, espumillón... yo voy a utilizar Lana.
Tras forrar todo el aro, colocamos los elementos como más nos guste y una vez que tenemos clara la composición, procedemos a pegarlos.
Los ramilletes y las flores, yo los he pegado con silicona y para que se queden más sujetos y no se vea el pegote de pegamento, he continuado enrollando lana alrededor de ellos.
El resto de los elementos los he pegado con silicona o pinchado con alfileres.
Finalmente, en la parte de atrás, colocamos una arandela para colgarlo, esta arandela yo la he pegado con silicona y también le he puesto alfileres.
Y como toda mi decoración va prácticamente en un lateral, el peso que tiene hace que la corona no se quede en la posición que queremos cuando la colgamos. Para evitarlo, en la parte trasera de la corona, colocamos algo de contrapeso en el lado contrario a nuestra decoración: yo he usado unas arandelas de metal que pesan bastante.
